Tuberculosis del olivo

tuberculosis del olivo
Verruga formada por la Tuberculosis del Olivo


La tuberculosis del olivo es una enfermedad producida por una bacteria, la Pseudomona savastanoi, la cual aprovecha cualquier herida para infectar al olivo. Esta enfermedad se caracteriza por la formación de verrugas en las ramas del olivo. Esto puede provocar la desecación de las ramas por falta de savia, ya que las verrugas pueden producir la asfixia de los vasos leñosos (xilema) conductores de savia. La tuberculosis es una de las enfermedades que no tiene una cura.

Resistencia de las variedades de olivos a la tuberculosis

Entre las variedades de olivos más resistentes a la tuberculosis podemos encontrar las variedades Picual y Verdial de Huevar. En cuanto a las variedades más susceptibles al contagio cabe destacar las variedades Arbequina, Cornicabra y Verdial de Badajoz. En cuanto al resto de variedades presentan una resistencia intermedia.

Técnicas para evitar la propagación de la tuberculosis

Una vez contagiado un olivo no hay cura. Se puede mermar su propagación utilizando diferentes técnicas:

  • Debemos proteger los utensilios de recolección de aceitunas con uso de gomas nuevas y blandas.
  • Evitar la recolección con lluvia u olivos mojados por el rocío. Las bacterias utilizan el agua como vehículo de propagación.
  • En cuanto a la poda, primero se aconseja podar los olivos sanos y, posteriormente, los infectados.
  • Desinfectar herramientas de poda una vez podados los olivos infectados.

La lucha química contra la tuberculosis del olivo

Los tratamiento químicos se aconsejan realizaros en la época tras la recolección. En cuanto a los tratamientos químicos para paliar los efectos de esta enfermedad destacamos 3 productos químicos:

  • Los hidróxidos, de cobre o hierro (Hidrocuper)
  • La Dodina.
  • El peróxido de hidrógeno con plata (agua oxigenada con plata).

Este último es el que mejor resultados está obteniendo.

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